En una de las excursiones a las afueras de Bangkok, de camino a uno de los mercados flotantes, pasamos por una pequeña zona selvática llena de palmeras y canales artificiales de agua. Tras encontrarnos con algún pequeño reptil en la carretera, me quede mirando una de las palmeras de una plantación de coco
Y de repente, descubrí que en estos tiempos de iphones, ipads, tecnologías.. todavía hay gente que se anda por las ramas. Y no me refiero a nuestros queridísimos políticos o a nuestras grandes y cultas estrellas de televisión que alegran nuestras mañanas, tardes y noches.. sino a gente que trabaja y se gana la vida subida a los arboles.
Sobre una pequeña escalera (si se le puede llamar así) un hombre descalzo colocaba unos recipientes cerca de las hojas. Al ver mi cara de asombro, la guía me comentó que los colocaban para recoger el aceite de la palmera para cocinar o venderlo a los turistas.
A mí me parece, cuanto menos, muy muy curioso…
Y aunque la canción de hoy no vaya de palmeras, aceites y políticos, si hace referencia a que en algunos sitios hace falta sacudir determinadas estructuras (árboles) para cambiar las cosas (desigualdades, discriminación femenina..).
Con todos ustedes el gran Peter Gabriel: